Los pacientes con COVID-19 que tuvieron que ser tratados en el hospital experimentaron síntomas persistentes meses después de su estadía.
A nuevo estudio publicado en JAMA Network Open evaluó las trayectorias de los síntomas en pacientes hospitalizados por COVID-19 en los 6 meses posteriores a su estadía en los centros de salud.
Según los datos que recopilaron los autores, aproximadamente la mitad de los adultos tratados por covid en hospitales experimentaron problemas cardiopulmonares meses después de su estadía. Más de 7 de cada 10 adultos encuestados tenían síntomas como tos, latidos cardíacos rápidos, dolor en el pecho y dificultad para respirar a los seis meses.
Aproximadamente la mitad de los 825 adultos que respondieron también reportaron fatiga o limitaciones físicas, uno de los síntomas más comúnmente asociados con largo covid.
“Los pacientes de mi clínica a menudo quieren saber cuándo volverán a su estado de salud habitual. Según estos datos, parece que muchas personas hospitalizadas por COVID-19 deberían esperar que los síntomas duren hasta seis meses o incluso más”, dijo el primer autor Andrew J. Admon, MD, MPH, en un comunicado de prensa por los Institutos Nacionales de Salud, que respaldaron el estudio.
Admon es neumólogo en LTC Charles S. Kettles VA Medical Center y profesor asistente en los departamentos de epidemiología y medicina interna de la Universidad de Michigan, Ann Arbor.
Otros síntomas informados por los encuestados fueron hinchazón en las piernas, los tobillos y los pies. Algunos también necesitaron apoyo de oxígeno en el hogar debido a la dificultad para respirar.
En el primer mes, el 55 % de los pacientes tuvo dificultades para realizar sus actividades cotidianas, como preparar comidas, comer, bañarse o simplemente caminar por una habitación. Sin embargo, esto se redujo al 47% a los seis meses.
“Estos hallazgos informarán los programas diseñados para ayudar a los adultos a recuperarse de casos graves de COVID y guiarán cómo los médicos deben controlar a los pacientes en el año posterior a la hospitalización. También pueden ayudar a dar forma a futuros estudios de investigación clínica”, dijo en el comunicado de prensa James P. Kiley, Ph.D., director de la División de Enfermedades Pulmonares del Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI).
El equipo de investigadores también evaluó las trayectorias financieras de los pacientes. Descubrieron que más de la mitad (56 %) de los pacientes experimentaron dificultades financieras y lucharon para pagar las facturas después de su hospitalización.


