El ayuno intermitente se ha convertido en el programa dietético más popular y más seguido en los últimos años. Pero a medida que los científicos intentan investigar sus supuestos beneficios, también descubren algunos de sus sorprendentes inconvenientes.
A nuevo estudio publicado en la revista Appetite por investigadores de la Universidad de Texas A&M encontraron un vínculo que sorprendentemente conecta el ayuno intermitente con los atracones y otros trastornos alimentarios a largo plazo.
Dado que no ha habido tanta investigación que examine las asociaciones del ayuno intermitente con factores psicológicos, el equipo exploró esta área del programa de alimentación. En concreto, investigaron la relación entre la dieta y los atracones, la impulsividad, la alimentación intuitiva y la alimentación consciente.
“No había mucha información sobre los efectos psicológicos del ayuno intermitente, solo su impacto en resultados médicos como el peso y el colesterol. Estaba interesado en ver si esta forma específica de dieta restringida en el tiempo, donde las personas pueden ignorar sus señales de hambre durante largos períodos de tiempo, también podría inducir a los atracones”, el autor Jordan Schueler, MS, Ph.D. candidato en la universidad, dijo Zorro Noticias Digitales a través de un correo electrónico.
Para el estudio, Schueler y sus colegas tomaron muestras de 298 estudiantes universitarios reclutados a través de un gran grupo de sujetos de psicología de universidades del suroeste. Los participantes se agruparon en tres en función de su estado de ayuno intermitente: actual, pasado y no. A todos se les pidió que completaran cuestionarios sobre su estado de ayuno intermitente y sus hábitos alimentarios.
Después de analizar los datos de los participantes, los investigadores encontraron que aquellos que practicaron el ayuno intermitente en el pasado tenían más probabilidades de comer en exceso que aquellos que nunca probaron la dieta y los que actualmente siguen el programa. Dijeron que sus hallazgos añaden credibilidad a la creciente evidencia en contra del ayuno intermitente.
“Una explicación es que aquellos que participan activamente en [the diet] todavía pueden estar ‘exitosamente’ participando en la rigidez y el autocontrol en torno a sus conductas alimentarias. Sin embargo, es común experimentar un efecto de rebote después de una restricción calórica severa, durante la cual se producen atracones”, explicó Schueler.
Ella añadió. “Nuestro hallazgo sugiere que aunque [intermittent fasting] no parece ser un factor de riesgo para los atracones mientras uno participa activamente en la dieta, puede tener efectos duraderos en la relación de uno con la comida”.
Es importante señalar que los hallazgos del estudio son limitados debido a la falta de diversidad en su muestra. Se necesitan futuros estudios longitudinales para establecer la direccionalidad de las asociaciones.


